los 10 berracamente buenos de latinoamerica

Bueno, pues me han pasado el meme de ¡Viva la patria Grande! Y como resulta que el joven que me lo pasó me tiene medio amenazada por cierto análisis de discurso que insiste, con una persistencia enfermiza, le deje leer, pensé que “sacándola barata” yo lo único que tenia que hacer era contestar el meme....o hacer la tarea de publicidad. Mmmmmmm, está bien...el meme.

La idea es organizar una lista de los 10 personajes latinoamericanos más importantes para uno. Como al señor fue al primero que se le ocurrió, pues puso los más fáciles y obvios, lo que no tienen perdida. Pero me pasó el batón (el meme) a mi, y a mi me provoca aprovechar el espacio para reivindicar a algunos que fueron un ÉXITO..que nadie conoció...o al que nadie le pone mucho cuidado. Al menos es un intento, por que hay algunos que no se pueden sacar....

Así que sin más preámbulos (lo siento, pero me salto las instrucciones por que son largas, las van a repetir en todas partes, y me aburrro (y no soy burro)).

“los 10 berracamente buenos de Latinoamérica”

1. Gabriel García Marquez. Y no, no es un capricho de colombiana. El tipo es un genio. Es un escritor (por que no falta el despistado) que se ganó el premio Nóbel de literatura por su maravillosa obra “Cien años de Soledad”, pero al que debieron darle mucho mucho más por su “El amor en los tiempos del cólera”. Florentino Ariza debería ser el modelo “latin lover” en el mundo, y ENTONCES el mundo sería un mejor lugar. De eso estoy segura.
2. Jorge Luis Borges. Otro escritor (pal mismo despistado) del cuál uno no debería decir mucho, sino leer más. En todo caso su obsesión por los laberintos, los espejos, las bibliotecas y en general todo aquello que uno podría llamar “objetos comunes”, han hecho este mundo un mejor lugar. Es el colmo que no le hayan dado nunca un premio nobel, pero eso al final lo convierte en una figura mejor, tan “ignorado” como cualquiera de nosotros, aunque ninguno de nosotros podrá ser jamás un Borges. Para una explicación más detallada vaya a la página del colega.
3. Isabel Allende. Y esto ya parece es una lista de escritores. Pero cómo saltármela. Sería saltarme toda mi adolescencia leyendo sus historias, desde “la Casa de los Espiritus” hasta “LA hija de la fortuna”, pasando por su colección de cuentos para niños. Toda su obra demuestra eso que los latinoamericanos llevamos en la sangre: coraje. Y que sea una mujer la que lo narre tan magistralmente, bueno, hay cosas que el dinero no puede comprar: afortunadamente los libros de Allende si.
4. Cantinflas. Para pasar al cine un rato. Yo no puedo creer que los mexicanos no le rindan mas homenajes a un personaje que logro incluirse como verbo y sustantivo en el Diccionario de la Lengua. El que nos hizo reír y llorar desde que éramos niños (todavía lo hace) y que además, ahora lo entiendo, lo único que hizo para eso, era contar las cosas tal como suceden en este país: qué culpa él, así son por acá. Díganme si no es la cosa más divertida del universo.
5. Rafael Escalona. Los de acá no lo conocen. Bueno, creo que en realidad muy pocos de los de allá lo hacen. Es un compositor colombiano de vallenatos. El mejor, a mi gusto. Con sus historias nos enseño todo, desde lo que era montarse en un monstruo grande, al que le llaman tren, hasta los problemas de un pueblo por que se han robado una custodia grande. Aprendimos con él que el que no vuela no sube, y que no hay que hacer mucha bulla, cuando hay alguien amarrándose la cabulla. Tuve el honor de conocerlo, de verlo vivo (aún vive, pero está muy enfermo) y siempre me ha dolido que en realidad en mi país no se le reconozca como se debe el genio que este señor tiene.
6. Fito Paez. Ya entrados en gastos con esto de la música. Fito es grande, si señores. Sus letras han recuperado, a mi gusto, el sentido que tienen las canciones en el mundo: servir de herramientas para aquellos que no tenemos ni la menor idea de cómo decir las cosas y que suenen bonito. Lo que pasa es que Fito ha crecido opacado a la sombra de Charly García, y como Fito no se tira desde las ventanas a las piscinas (albercas) pues el mundo ha oído mucho más al segundo. Pero no, Fito es, y que me perdone la iglesia, el verbo hecho carne.
7. Pablo Neruda: volviendo a las letras. No hay nadie como Neruda, ni hay nada mejor que tener la posibilidad de ir a “isla negra” y ver su casa. O a “su Valparaíso” y entender por que, cuando uno vive en una casa como la que el man vivió, uno tiene que escribir hermosos poemas de amor. Por que todos, en algún momento de la vida, hemos podido escribir los versos más tristes esta noche, pero sólo Neruda nos enseño, que las metáforas son del que las usa, no del que las escribe.
8. El Chavo del Ocho. Ayyy yo se. Me van a decir que en realidad no existió. Pero lo siento, para mi el chavo es mucho más que un solo personaje ficticio construido por unos amigos que descubrieron como divertirse en televisión, con el beneficio de que además divertían al mundo entero. No se cómo los mexicanos no están más orgullosos de un personaje que logro hacer que en Rusia preguntarán qué era una “torta de jamón”. A mi me parece que sería una falta de respeto no incluirlo en una lista así: ha sido el primero en demostrarnos que si, que tenemos muchos mucho más en común de lo que nos diferencia. Y que al final en todas partes hay una bruja del 71.
9. Caetano Veloso. Saltando de nuevo a la música. Compositor y cantante brasileño. Por que nos demostró, por si alguna vez todavía teníamos duda, que en portugués todo se oye mas bonito. Por sus increíbles boleros, por como canta “María bonita”, por sus participaciones en las obras de Almodóvar, por todo él.
10. Fernando Botero. Y que nadie diga que no estoy orgullosa de lo mio. Bueno, más allá de que me guste o no su obra (en realidad la nueva, que incluye retratos de masacres y eso no) lo que si me ha gustado es lo que hizo por Bogotá y Medellín. Dono sus colecciones y mantiene sendas exposiciones en ambas de ciudades para todos sus “coterráneos”. Ese es su mayor acto: el compartir sus obras, sus cuadros, sus colecciones con los demás, con su gente, para que no se conviertan en caprichos de nuevo rico en una casa vacía, sino que sirvan de alguna manera útil (al menos espero). Por eso, y por que, como dice la canción: “si no fuera por Botero, caramba, a las gordas las miraríamos feo”.
    
    La ñapa: (El pilón).
    
11. Adolfo Bryce Echenique: Escritor (pal despistado de siempre). Por su “La amigdalitis de Tarzan” que nos enseño que todo en este mundo se reduce a un problema de “estimated time arrival” y por que al final, sobre todo los bloggers, tenemos que reconocer, como él lo hizo, que “fuimos mejores por carta”. Nada que hacer.

Voluntariamente me salto cualquier referencia a los políticos, libertadores, lideres del pueblo, presidentes, guerrilleros, dictadores, y/o demás animales que la fauna política de la región ha dado. En lo que a mi respecta, en política, Latinoamérica solo ha ido del timbo al tambo, de malo en peor, y viceversa, sin aprender nada. Yo se, lo que pasa es que somos muy “jóvenes”, pero en esta adolescencia estúpida se nos va a ir la vida a muchos...y nada que aprendemos.

Ahh si, y le pasó el balón a:

El Chico de la Tapa.
Don Patton
Don Alrevez
Diario de Pacha.
Juan Falla.

(Yo se colega que eran 10 pero es que no conozco a tanta gente, qué le vamos a hacer).