Si las Flans sacarán un disco ahora

Hay cosas que uno no calcula de eso que es convertirse en “adultos hoy”. Digo, uno más o menos vio a sus padres o tíos o primos mayores y más o menos se hace a la idea de qué le trepa pierna arriba, uno vez ingresado a ese grupo de “adultos contemporáneos hoy” (que hasta son un genero musical ya, según Spotify).

El asunto es que a mi nunca se me había pasado por la cabeza, que a medida que tus amigos crecen y van “ascendiendo” en su carrera, uno empieza no sólo a hablar con el amigo, sino con la secretaria del amigo. Ya les ha pasado?. De pronto te llaman de la oficina de tal o cual amigo, y uno antes de saludar con el concebido “quihubooooooooo marik, que más de usted”, tiene que pasar por la cortesía de saludar a la secretaria con un muy educado “si claro, lupita, buenos días, yo espero en la línea”. Mientras, claro, “le comunican”.

Darme cuenta de ese detalle medio me sacudió por dos razones. La primera, yo he sido esa “lupita” para casi todos mis jefes. Me acuerdo perfecto, de estar llamando a los amigos de mis jefes para comunicarlos. De hecho, en varias ocasiones he terminado siendo amiga de esos amigos. Raro, no?. Digo, no había pensando que me podía pasar a mi, y sobre todo, hasta el momento no había pensado que pensarían los amigos de mi jefe de mi. Otra vez esta vieja que jode?. Qué vieja tan bruta tiene fulanito pa que le ayude?. Cómo se aguantara mi amigo el tono de voz de esa vieja??. No se, podrían pensar tantas cosas. Yo pienso tantas cosas cada que me llama la secre de algún amigo…que bueno…digamos que si el ladrón juzga por su condición yo no salgo muy bien parada en todo este asunto.

Y lo segundo es que hay secres que si te caen muy bien. Tengo un amigo que para más tema, tiene es un secretario. El man me cae RE bien. No sólo por que me parece del puthas que haya manes que no le tengan miedo a ese trabajo, sino que en serio aprovecha cada ocasión que tiene pa medio bromear conmigo. Algo del estilo de “si ya estamos en estas, pasémosla bien”. No se, ya hasta me rió con el man cada que no le contesto el teléfono y me tiene que dejar mensaje de que me comunique con mi amigo. Es como divertido, por que si parece un amigo más. Deja mensaje del tipo “ayyy otra vez nosotros jodiendo, pero es que ya sabes que “fulanito” quiere hablar contigo, que si le puedes marcar”. Un secretario bien informal, lo admito, pero creo que es por eso que me cae bien.

Yo no lo conozco en persona, claro, pero el otro día haciendo la lista para unos posibles invitados a una posible fiesta (esa es otra cosa de ser adultos, uno dejo de hacer fiestas en 8 minutos llamando a todo el mundo, para planearlas con meses de anterioridad) me ví a mi misma diciéndole a mi amigo, “oiga, y por qué no invita a su secretario”.

A mi amigo no le gustó la idea. No del todo, puedo jurarlo.

Es una lástima, por que la verdad yo quería ver si podía ser buena amiga de las (los) secres de mis amigos. Las flans deberían hacer una canción con esto.

Y que levante la mano el que me entienda.